El entrenador del Oporto, el portugués José Peseiro, dio detalles este lunes sobre su desencuentro con el defensa brasileño Maicon, que pasó de ser capitán y pieza fundamental del equipo a salir cedido al Sao Paulo en el mercado de invierno.
En un foro con otros técnicos realizado en el municipio luso de Setúbal, Peseiro fue preguntado por lo ocurrido con Maicon, cuya caída en desgracia se originó en la derrota en casa frente al modesto Arouca (1-2).

Un ingenua pérdida de balón del central permitió el segundo gol de los visitantes, y nada más subir al marcador, el defensa se retiró del campo alegando una lesión muscular.
El entrenador de los "dragones" dejó entrever que su sustitución no tuvo nada que ver con problemas físicos, sino que se debió a una cuestión mental.
"Quizá no era indisciplina, quizá es fragilidad", afirmó Peseiro, quien subrayó que "no todas las personas consiguen lidiar" con errores que no se pueden enmendar porque "no son lo suficientemente fuertes".

"La primera cosa que le dije fue: 'Quédate ahí, que vas a hacer el gol del empate'. Pero no funcionó, ¿qué le voy a hacer? No tenía una pistola para apuntarle y obligarle. Los jugadores no son marionetas", argumentó.

El preparador luso, que se hizo cargo del Oporto hace dos meses, reconoció que "no es fácil ser futbolista en un equipo" de esta entidad, ya que "todo lo que se hace tiene repercusión".

La salida del central brasileño, de 27 años, supuso una baja importante para los "dragones" dada su condición de titular indiscutible, y por el momento su lugar ha sido ocupado por el joven nigeriano Chidozie.

EFE